Y me preguntaba por qué no, si era un trabajo cómodo y, además, me pagaban muy bien. Seguramente el trabajo ideal para muchos: poco trabajo y un buen salario.
Pero no, para mí no lo era. Yo consideraba que no había dedicado más de 20 años de mi vida a formarme para tener un trabajo dónde no crecía ni personal ni profesionalmente, por muy bien que me pagaran. Entonces me di cuenta de que ahora era el momento de actuar, mañana es demasiado tarde.